
EGRESADOS
Angeloni Silvina E.
Arias Sonia A.
Benedetti Damián M.
Benedetti Mirta Inés
Cobre Lorena C.
Correa Marcelo R.
De Zan Diana M.
Della Giustina Liliana M.
Fiorotto María Alicia
Gabriel Sandra D.
García María Estela
González María Cristina
Kneeteman Gerardo M.
Korell Mariela L.
Krenn Mauricio R.
Landra Mauricio A.
Marchesini Leticia M.
Pedroza Luis Horacio
Pelaez Mario Daniel
Tommasi Mariela M.
Comenzamos la trayectoria en el año 1984 siendo aproximadamente 40 alumnos, de los cuales terminamos sólo 20 en 1989, año en el que estábamos atravesando una hiperinflación en la Argentina, la cual influyó fuertemente en la derrota electoral y posterior renuncia del presidente, en ese entonces Raúl Alfonsín. Se da la devaluación del austral, donde miles de personas pasan a la pobreza, causada por esta inflación, la cual devoró salarios, generó revueltas, saqueos y llevó al adelantamiento del traspaso del poder luego de las elecciones presidenciales en el mismo año de Carlos Menem. La gente del campo estaba mal económicamente: “no nos sobraba nada”.
EN EL COLEGIO
En ese entonces en el colegio sólo había cinco cursos y el laboratorio. No había sala de video aún, en la planta de arriba solo se usaba un aula que era para la materia de mecanografía. Los alumnos no acostumbrábamos a usar la puerta central para el ingreso, sino que utilizábamos la puerta que es hoy en día es la entrada de la escuela primaria; el objetivo era mantener el salón de entrada del colegio, por lo que solo accedían al colegio por esa puerta los profesores y directivos.
El horario de entrada era de 7:05 hs, generalmente hasta las 11:30 hs y un solo día salían a las 12:30 horas. No éramos de faltar nunca, salvo que lloviera muchísimo y esto impidiera que podamos asistir.
El uniforme era guardapolvo sin corbatas en las mujeres, jean y zapatos, los varones camisa celeste con corbata azul, pantalón azul y zapatos, ambos usábamos blazer color azul también.
La relación con nuestros profesores era de autoridad, no teníamos muchas charlas, más que preguntar si no entendíamos algo relacionado con la materia. En cuanto a las materias eran todas básicas y contables.
En nuestra trayectoria probaban cosas que funcionaban en sistemas educativos de otros países a este, como por ejemplo las calificaciones. Primeramente nos evaluaban con superó, alcanzó, no alcanzó, luego de eso la calificación fue numérica, existían evaluaciones cuatrimestrales y de las cuales no había recuperatorio.
Fuimos la promoción creadora del primer centro de estudiantes. En ese momento se estaba dando la libertad a los estudiantes, recordamos que estaban las listas lila y verde.
FUERA DEL COLEGIO
Cómo viaje educativo realizamos el tradicional viaje a la ciudad de la Plata en segundo año, la Casa de Gobierno, Capital Federal y Museos.
En ese momento por actividades extra áulicas no había mucho, algunos iban a clases de piano y también a clases de danza.
SALIDAS
En aquel entonces nuestras salidas empezaban a ser a partir de los 16 años; eran a la confitería, existían Uamá y Quo Vadis, generalmente con comprar la entrada anticipada ya tenías una consumición paga. No éramos de tomar mucho, ya que no estaba bien visto en la sociedad, y si lo hacíamos y nos caía mal enseguida nos quedábamos en el molde. Las bebidas del momento eran por ejemplo Séptimo Regimiento, Whiscola, Cerveza, y Doble V con Coca Cola, que en ese momento era lo más barato y para lo poco que nos alcanzaba.
Los domingos solíamos hacer matiné y también pasábamos películas, las cuales empezaban a eso de las 21:30 horas y juntábamos así plata para pagar el viaje de egresados.
No solíamos hacer previas para luego ir al boliche. Se usaban los “asaltos” que eran reuniones en alguna casa, generalmente llevábamos algo para comer y solíamos estar tranquilos ahí.
Las bandas del momento eran “Virus”, “Soda Stereo”, “Zaz”, “Guns N´Roses”, “Enanitos Verdes”, mucho inglés y cero cumbias, como bandas locales era “Nueva Lógica” y “Luz Verde”.
ÚLTIMO AÑO
Optamos por viajar a la localidad de San Carlos de Bariloche con la empresa Basa estudiantil. El viaje tuvo un costo de $400 y pagamos en 24 cuotas de $25.
Para reunir el dinero vendimos empanadas, tortas, canelones, números de rifa, cosméticos a cargo de una de nuestras asesoras, que al venderlos nos dejaba un porcentaje y como ya mencionamos antes hacíamos matiné y pasábamos películas.
El último año festejábamos tradicionalmente el paseo del estudiante, donde salíamos el día antes a “pedir” corderos. También en el colegio se festejaba el día del profesor, donde generalmente los alumnos se disfrazaban e imitaban a cada uno de los profesores.
ANÉCDOTAS
Nuestra adolescencia fue muy buena y tranquila, ya que nos destacábamos por ser un grupo “miedoso”, por lo que muy pocas veces recibimos algún reto o castigo, lo que sí recordamos es que el colegio rompimos una silla, la dejamos casi armada que para que cuando el profesor viniera, se sentara y se caiga, así que eso fue lo que sucedió, por esa acción recibimos un castigo el cual fue llevarla a arreglar.
Cómo olvidar a la Hermana Mari, la cual era para nosotros el ángel defensor, siempre con toda la onda, era la intermediaria entre los alumnos y profesores.